Los dos primeros sets que dejó Rafael Nadal frente a Tomas Berdych fueron para guardarlo en vídeo. El checo capeó como pudo el huracán y vio cómo en una hora, Rafa ya lideraba dos sets a cero. Al final, 6-0 6-1 7-6 para el balear, que un partido más, volvió a dejar un muy buen sabor de boca con su tenis.
Tras un primer juego bastante competido, donde presagiábamos bastante batalla entre los dos, Rafa puso el modo ventilador y comenzó a repartir de lado a lado de la pista mientras Berdych solo hacía ver bolas chocar contra la pared que tenía detrás. El revés del balear sonaba afinadísimo. Parecía que la ponía donde quería con este golpe, sobre todo con el cruzado, que era capaz de encontrarle ángulos con una facilidad pasmosa. Con su drive, más de lo mismo. A través de bolas pesadísimas, Berdych no lograba montarse sobre la línea ni era capaz de controlar la pelota del español. No es de extrañar que con todos estos ingredientes, Nadal necesitara solo de 26 minutos para hacerle un rosco nada más empezar.
Parecía un partido entre rivales de distintas categorías, cuando el checo enviaba la pelota fuera una y otra vez al encontrársela encima de lo rápida y pesada que le venía. El ritmo de bola de Nadal estaba siendo espectacular y es que este Rafa es muy distinto al que cayó en tres mangas hace cuatro años precisamente ante Berdych en este torneo. Una gráfica de Eurosport nos mostraba la diferencia de dónde golpeaba el balear la pelota en los segundos saques al resto, dando varios pasitos hacia delante, montado completamente sobre la línea de fondo y es que tal y como él mismo ha dicho en varias entrevistas en los últimos tiempos, sabe que necesita ser más agresivo a estas alturas de su carrera si quiere prolongarla mucho más y hoy dejó claro que sabe jugar así y hacerlo a un nivel altísimo. El reloj marcaba justo una hora de partido y Berdych se sentaba dos sets a cero abajo y habiendo ganado solo un juego.
Y es que el checo estaba dejando unos números pobres con su saque, con un 38 y un 35% de primeros en cada uno de los dos primeros sets. Sin su principal arma, es normal que Rafa hubiera conseguido tal brecha en el marcador. Era normal que en este tercer set, Berdych se soltara algo más al verse prácticamente derrotado y que Rafa se relajara un poco. El checo mejoró su porcentaje de primeros y solo con eso, ya se pudo ver un partido mucho más igualado que lo visto hasta entonces. Comenzó también a pegarle mucho más duro a la pelota y le quitó un poco de iniciativa a un Rafa que ya inquietó a Berdych al resto con 5 iguales pero no fue hasta el tiebreak cuando pudo sellar su pase a cuartos de final.
Antes del torneo, quizá no eran demasiadas las expectativas que se tenían puestas en Nadal por lo visto en los torneos de inicio de temporada, bajándose incluso de Brisbane por lesión pero el balear llega a cuartos sin ceder ningún set y siendo, quizá, el que mejores sensaciones deja con su juego de los favoritos. Chocará por un puesto en semifinales ante Frances Tiafoe, que no tendrá nada que perder. Pinta a gran partido.