Las mujeres toman el mando

Por cuarta ocasión en lo que va de siglo, España tendrá más representación femenina que masculina en la segunda ronda de un torneo de Grand Slam.

Fernando Murciego | 4 Jul 2018 | 09.00
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En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.
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Pocos imaginaron esta situación al comienzo del torneo hace dos días. Wimbledon 2018 nos regalaba una amplia lista de jugadores españoles en busca de la gloria en el All England Club. En total, ocho hombres y cuatro mujeres, el doble de posibilidades en el apartado masculino que en el femenino. La estadística, que siempre hay que echarle un ojo en estos casos, decía que España llevaba ¡17! temporadas consecutivas completando los cuatro Grand Slams con amplia victoria de nuestros chicos ante nuestras chicas en lo que se refiere a presencias en segunda ronda. Sin embargo, todos los récords están para romperse y este se ha detenido en seco hace justo unas horas.

Rafa Nadal, Feliciano López y Guillermo García López. Tres españoles en la segunda ronda del torneo. Garbiñe Muguruza, Carla Suárez, Lara Arruabarrena y Sara Sorribes. Cuatro españolas en la segunda ronda del torneo. Aunque solo sea una unidad más, la cifra habla por sí sola sobre el horizonte que nos podemos encontrar de aquí a los próximos años. Una generación dorada en la ATP que poco a poco se va apagando y nuevos jóvenes que vienen apretando por detrás pero que la hierba todavía se les hace cuesta arriba. Tampoco podemos volvernos locos, igual el destino nos hace esperar otros 17 años para volver algo así, pero seguro que muchos de ustedes recuerdan cómo eran las cosas al principio de siglo, con Arantxa y Conchita siendo protagonistas en cada telediario y el vestuario masculino en busca de un hombre que pudiera acaparar algo de foco.

Wimbledon 2000, Open de Australia 2001 y Wimbledon 2001 fueron los otros Grand Slams en el presente siglo en los que tuvimos más españolas que españoles en segunda ronda de un torneo de esta categoría. Curiosamente, en tres de las cuatro ediciones se dio el suceso en el pasto londinense, lugar que siempre obligó a la mayoría de tenistas a tomarse vacaciones antes de tiempo, rindiéndose ante unas condiciones que no les eran favorables y tirando la toalla antes del sorteo del cuadro. Pero no en las chicas donde, quizá por tanto insistir, conseguimos sacar por la puerta grande a una Conchita Martínez que fue capaz de tumbar a Navratilova en toda una final. Era otra época, otros tiempos que ahora volvemos a recordar ante los presentes acontecimientos.

Por trasladarnos a uno de aquellos cuadros puntuales, Wimbledon 2001, por ejemplo. En aquella ocasión España aterrizó en Londres con 15 hombres en el cuadro masculino (en 2018 ha logrado meter ocho en el cuadro final) y once mujeres en el cuadro femenino (este año han sido cuatro). De entrada, llama la atención el terrible descenso de protagonismo que hemos sufrido a estas alturas. Pasada una ronda, solo sobrevivieron cinco varones (Tommy Robredo, Germán Puentes, Carlos Moyá, Juan Carlos Ferrero, Félix Mantilla) y seis hembras (Vivir Ruano, Conchita Martínez, Arantxa Sánchez Vicario, Ángeles Montolio, Marta Marrero y Cristina Torrens).

De los chicos solamente Juan Carlos Ferrero lograría pasar una ronda más, antes de ser eliminado en sets corridos por Rusedski. Mientras que en las chicas, Conchita Marínez iba a demostrar que todavía guardaba una bonita conexión con la hierba y se metía entre las 8 mejores del torneo, donde fue arrollada por Justine Henin (6-1, 6-0). ¿Qué pasará esta vez? En liza todavía contamos con dos ex campeones, Rafael Nadal y Garbiñe Muguruza, algo que no podíamos decir hace 17 años. Lo único que está claro es que todo en esta vida es cíclico, y lo que parece que ya es agua pasada puede volver en cualquier momento. En este Wimbledon, España puede estar muy orgulloso de todos sus jugadores. Pero sobre todo, de sus chicas.