
No siempre sirve con jugar el mejor tenis o competir mejor que el rival, hay veces que se necesita un poco de suerte para sacar un partido cerrado hacia delante. Esa suerte que, en muchas ocasiones, no estuvo del lado de Rafael Nadal, este domingo en el Masters 1000 de Roma sí que apareció para salvarle de una derrota que acechaba más cerca que nunca. Fue la lluvia, algo incontrolable, la que sacó del encuentro a Alexander Zverev y reenganchó al español de cara a capturar su tercer título de la temporada y recuperar así el número 1 mundial.
“Cuando ha ocurrido la suspensión por la lluvia no he sentido que pudiera llegar a beneficiarme. Por supuesto, analizando la jugada ahora fríamente, es obvio que me ha ayudado. Me ha servido para regresar a la pista con las ideas y la táctica mucho más claras. La verdad es que he tenido suerte de devolverle el break justo después del receso, entonces he comenzado a jugar de manera estratégica y con determinación”, valoró el manacorense en rueda de prensa.
“Él ha empezado a hacerme dejadas que no sabía ni por dónde venían, dejadas que no existían en mi cabeza, pero las ha hecho una y otra vez de manera muy eficaz. Cuando empezó a nublarse el cielo, el juego se volvió mucho más lento, ahí me entró una nueva sensación diferente a la del inicio, una sensación que me ha acompañado en algunos momentos durante la semana”, añadió el español.
Pero el duelo no empezó tan mal para Nadal, aunque luego todo se fuera torciendo. “El primer set ha sido fantástico en todos los sentidos, el mejor tenis que he jugado este año sobre tierra batida. Sé que la bola es diferente en Roland Garros, la pista también es diferente. Por supuesto, las condiciones son también diferentes. No creo que lo sucedido aquí tenga un impacto directo con lo que vaya a suceder allí, pero sí sé que ganar títulos te beneficia mucho más que perderlos”, señaló Rafa con la voz de la experiencia.
Preguntado también sobre su rival, un hombre que nunca venció a un top50 en territorio Grand Slam, el balear lo tiene muy claro. “Tenis es tenis en cualquier torneo, no importa que sea en Grand Slams, Masters 1000 o en otro lugar. Es imposible no obtener buenos resultados en Grand Slams si antes los has tenido en Masters 1000, es una cuestión de tiempo. Jugar partidos al mejor de cinco sets es una ventaja para los grandes jugadores y Sascha es uno de ellos. Si él no consigue buenos resultados en Grand Slams en los próximos años, podéis venir aquí y decirme que me he equivocado, pero no creo que eso suceda”, concluyó.