Pastel sin guinda
Caroline García arruina la celebración de la nueva número 1 del mundo y captura el título en Beijing. La francesa encadena once victorias consecutivas.


Un día después de disfrutar del mejor día de su vida, Simona Halep sufrió una derrota dolorosa pero que no escuece tanto como las otras. La rumana cayó en la gran final de Beijing ante una Caroline Garcia (6-4, 7-6) que ya acumula dos semanas sin conocer la derrota. La gira asiática ha sacado lo mejor de esta tenista que en un segundo lograba el mejor trofeo de su carrera y mañana lo acompañará con el mejor ranking de su vida.
El partido podía aterrizar en la cabeza de Halep de dos formas muy distintas. Por una parte, sin ninguna presión, sobre todo después de haber logrado ya el objetivo más deseado, el de alcanzar lo más alto del ranking. Pero eso mismo podía llevarle por otro camino muy diferente, el de la obligación de cumplir con la expectativa y celebrar este ascenso de la mejor manera posible, con una copa bajo el brazo. Hubiera preferido Simona que se diera la primera opción, así fue cómo planteó la batalla, pero poco podía hacer si al otro lado de la red se hallaba una mujer en el momento más dulce de su carrera e inmersa en una dinámica tan positiva que poco le importaba si enfrente estaba la nueva reina del circuito o la número 300 mundial.
Y eso que arrancó la función con break a favor de la de Constanta, pero nada significó. En seguida empezó a remar la tenista gala, a base de golpear tan duro como solo ella sabe y apoyándose en su gran servicio, para poco a poco ir tejiendo la remontada y sentenciar con una segunda ruptura en el último juego del parcial, restando con 5-4 a su favor, cuando más daño le puedes hacer a tu rival. Seguro que hasta ese momento la gente esperaría ver un paseo de Halep para acompañar la alegría que se dio ayer ante Ostapenko, pero hoy la tarea era de todo menos fácil. Alguno miraría seguro la clasificación y se percataría de que Garcia no venía de vacío en Beijing, sino con un título en Wuhan y con las horas contadas para estrenar su nueva condición de top10. Es decir, en racha.
Pero la oportunidad merecía una batalla como ésta y, para no quitarle emoción, poner a la mejor jugadora del mundo en sus primeros apuros. Aunque todavía su nombre no aparezca por encima de todas las demás, Halep ya se siente como tal, por eso en la segunda manga salió a morder como una auténtica campeona, sin arrugarse tras lo ocurrido hace unos segundos, sin pensar en que quizá esta semana también podría acabar sin el premio del trofeo. Justo era ella la última mujer en levantar un Premier Mandatory esta temporada, hace ya unos cuantos meses en Madrid, pero eso de poco le servía ante Caroline, enfocada a capturar el primero de su carrera y sin perderle la cara al partido en ningún momento.
El drama siguió su curso hasta que la situación desembocó en un tiebreak, la última sala en la que Simona querría entrar. Etapa ya muy avanzada para combatir con los nervios y jugar sin algún que otro pájaro en la cabeza. Y se notó, le pesó demasiado la carga a la rumana y vio cómo el gran pastel reservado esta semana terminaría viniendo sin guinda, sin extra de azúcar. Segundo título en siete días para Garcia que mañana aparecerá como nueva Nº9 del mundo. En esa misma tabla, en lo más alto, una Halep que ya no encuentra a nadie más por encima de su cabeza… aunque la corona de campeona todavía deberá esperar.