
El Masters 1.000 de Toronto que da comienzo la semana que viene será uno de los grandes eventos del circuito más descafeinados de la temporada. El evento canadiense sufrió este martes las importantes bajas de Roger Federer y Rafael Nadal, que se unieron a las de tenistas como Andy Murray o David Ferrer, que tampoco disputarán el torneo.
El calendario de 2016 es diferente al de otros años debido a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro a principios de agosto. Esto hace que las semanas estén comprimidas y que apenas haya descanso entre un torneo y otro.
Es por esta razón que gente como Federer, Nadal, Murray o Ferrer, cada uno por sus motivos, consideren que jugar cuatro torneos de máximo calibre (Masters 1.000 de Toronto, Juegos Olímpicos, Masters 1.000 de Cincinnati y el US Open) es forzar demasiado la maquinaria. Más aún si en Río de Janeiro se compite en tres modalidades diferentes: individuales, dobles y mixtos, como es el caso de estos cuatro tenistas.
Andy Murray, número dos del mundo, campeón defensor en Toronto y reciente vencedor en Wimbledon fue el primero en anunciar su baja. El escocés argumentó que su cuerpo necesitaba un descanso después de haberse coronado en el último Grand Slam de la temporada. "Mi cuerpo necesita un tiempo de recuperación después de llegar a las últimas etapas de los torneos en los últimos meses", comentó.
Roger Federer, sorprendió dándose de baja la tarde del martes pero no se especificaba el porqué. "Es uno de mis torneos favoritos y me siento muy triste por no poder competir delante de los aficionados canadienses. Necesito algo más de tiempo después de Wimbledon, pero espero volver a Canadá el próximo año".
Por su parte, y unos minutos más tarde que el suizo comunicara su ausencia, Rafael Nadal hacía lo propio. “Me siento decepcionado de anunciar que no estaré disponible para jugar en Toronto este año. Sólo he podido entrenar una semana después de mi lesión en la muñeca y no estoy preparado para un evento tan importante”.
El evento “tan importante” quedó colocado la semana previa a los Juegos Olímpicos, una cita que se disputa cada cuatro años y que es una prioridad absoluta para mucho de los tenistas del circuito. Karl Hale, director del torneo canadiense recalcó la presencia de Novak Djokovic y de la gran estrella local Milos Raonic en el evento que da comienzo el próximo lunes, pero no pudo ocultar su malestar por las bajas. "Ciertamente estamos decepcionados. Roger y Rafa son dos de los tenistas más populares del mundo, y no tenerlos en Toronto es extremadamente desafortunado”, explicó ayer.
El Masters 1.000 de Toronto se quedó huérfano de los mejores tenistas del mundo. Nadal no quiere arriesgar y busca una mejor preparación para los Juegos Olímpicos. Federer dejó algo más de dudas sobre su estado físico, pero también prioriza representar a su país en Río de Janeiro. Murray y Ferrer, más de lo mismo. El evento canadiense se volvió un dolor de cabeza para algunos jugadores.