Ante Pavic y su lucha contra la mononucleosis
El tenista croata estuvo apartado por dicha enfermedad durante seis meses hasta que por fin, en mayo de este año, volvió a competir.


Es la mala costumbre de no prestar atención a los tenistas de tercera o incluso de cuarta línea. Jugadores que arrastran historias incluso más interesantes que los que se reparten los títulos cada domingo. Ante Pavic, croata de 26 años y que nunca ha pisado el top100, sufrió el curso pasado una mononucleosis que le apartó de los terrenos de juego durante seis meses. Este pasado mayo, el de Ogulin regresó a las pistas y así explica en esta entrevista para SweTennis la dureza de tener que recuperarse de una enfermedad como ésta.
“Me sorprendió cuando me enteré de que lo tenía. Luego fue muy duro, al principio yo estaba muy enfermo y tuve que estar tres semanas en el hospital”, relata Pavic. “Después de las tres semanas te dicen que tienes que estar tranquilo y no debes hacer ningún tipo de actividad física. El hecho es que hay que estar en la cama y no salir fuera de la casa, así durante un período de entre uno y dieciocho meses. En mi caso, después de un mes y medio o dos, traté de ser lo suficientemente apto para tratar de hacer ejercicio”, confiesa el hombre que tuvo que colgar la raque en noviembre de 2014.
“Recuerdo cuando volví a intentar jugar, las primeras semanas en la pista era francamente ridículo. Era incapaz de trabajar más de 15-20 minutos. El caso es que tu sistema inmunológico no está funcionando y lo que supone que debes hacer es estar en la cama durante tres meses. Me tomó seis meses para jugar torneos. Al principio yo mismo me veía que no estaba listo, pero tenía que empezar sí o sí. Ahora he estado jugando desde mayo pero con muchos altibajos, tengo que luchar y tratar de superarlo. He tenido un largo descanso por lo que ha sido demasiado tiempo de inactividad. Incluso mentalmente ha sido muy duro”, advierte el actual número 586 del ránking.
Superar las fases previas de Newport y Estocolmo han sido los resultados más sobresalientes de este croata que llegó a ser número 132 de la ATP hace dos temporadas. “Al principio parecía una batalla más física, mentalmente no era tan peligroso, pero después de unos meses sí que era realmente difícil. Empecé a luchar conmigo mismo y llegó a ser hasta algo negativo. Tuve que trabajar mentalmente para mantener el estado de ánimo”, revela el residente en Zagreb.
¿Se le ha pasado por la cabeza tirar la toalla? “He protegido mi ranking así que todavía puedo jugar la fase de clasificación del Abierto de Australia, ahora vengo en los torneos Challenger así que no he pensado en rendirme todavía, espero que no pase nada durante este periodo para que no vuelvan los pensamientos negativos”.
Ancic, Soderling, incluso Federer pasó por mononucleosis. Una enfermedad cada vez más ligada al tenista profesional. “He leído muchos artículos acerca de sus problemas. Robin, por ejemplo, tenía la variante dura mientras que yo tenía la normal”, explica el croata. “Busqué mucho en internet y he hablado con los médicos y las personas que la han sufrido. Es algo habitual en los tenistas debido a que en el tenis se viaja mucho y nos enfrentamos a cambios bruscos en el medio ambiente. Normalmente, si un virus está atacando ese lugar pero es bueno pues no pasa nada. Pero si tu sistema inmunológico está bajo en defensas, ese mismo virus puede terminar atacándote más peligrosamente”, sentencia Ante.