Ocurrió en los vestuarios del Us Open después de los partidos de cuartos de final. Stan Wawrinka, tan reservado como siempre, se disponía a dar una entrevista a un par de periodistas en los interiores del recinto neoyorquino. Cuando de repente, Roger Federer entra en escena y el de Lausana se lo empieza a ver venir. El desenlace, en el vídeo.