
Carla Suárez se despidió del torneo parisino al caer en tres sets en un igualado encuentro ante la rusa Anastasia Pavlyuchenkova. El partido pudo caer del lado de la canaria pero se decidió por pequeños detalles en la tercera manga. Carla volverá a España para preparar la eliminatoria de Copa Federación en Sevilla.
Carla Suárez y Anastasia Pavlyuchenkova se habían enfrentado en cinco ocasiones. Todas ellas terminaron cayendo del lado de la rusa. Hoy la canaria buscaba romper esas estadísticas y ganar el primer pulso. Hoy en la pista central de la capital francesa estuvo cerca, pero volvió a chocar contra la potente rusa.
Suárez arrancó errática y desorientada. Dos pelotas tocadas con el marco, otra a la red y la última fuera daban el primer break a favor de Pavlyuchenkova que también mantenía su saque sin dificultades.
A Carla le costó entrar en el ritmo de partido. Lo hizo tarde. La rusa comenzó con una marcha más que la canaria que iba a remolque. Sin embargo, el estado confuso le duró poco.
Suárez empezó a mostrar un mejor nivel de tenis hasta igualar el marcador a 2. Cogió la confianza necesaria para ver que podía competirle de 'tú a tú' a Pavlyuchenkova.
Pero con el empate en el electrónico todo volvió a cambiar. El primer set finalmente se definió por pequeños detalles. Carla encajó dos roturas de servicio de manera consecutiva y terminó cediendo ante la rusa por 6-2.
La primera raqueta española arriesgó demasiado y cometió excesivos errores no forzados en la primera manga. Fallos que solían quedarse en la red.No era el camino a seguir y así se lo hizo saber su entrenador Xavier Budó al acabar el primer set.
“Intentemos que lo que fallemos, lo fallemos de largo y no de red. Este es un partido donde si le igualamos las cosas le van –a Pavlyuchenkova- a entrar las dudas” comentaba Budó cuando hacía uso del ‘coaching on court’ entre set y set.
Y así fue. Carla redujo de manera notable los errores no forzados. Fue capaz de distinguir en qué bola había que apretar, en cuál tenía que reducir velocidad y en qué otras buscaba ángulos o movía a su rival. Esto, sumado al juego más profundo, hizo que el segundo set fuese una historia totalmente diferente al primero.
Suárez estuvo sólida desde el fondo de pista y menos errática. Trató mejor la pelota, la mimó y jugó de manera más inteligente siendo consciente de no entregarle tantos puntos gratis a Pavlyuchenkova. Carla igualó el partido y todo se definía en el tercer set.
En la última manga podía pasar absolutamente de todo. Impredecible vaticinar un final viendo lo ajustado que iba el partido.
“Cuando Anastasia fue por debajo estuvo ansiosa” le advirtió Xavi Budó nuevamente entrando en pista. “En este tercer set hay dos objetivos claros. El primero, aceptar ratos buenos de ella -Pavlyuchenkova-. Va a jugar duro y va a estar fina. Y el segundo es mantener la Carla del segundo set”. Era el camino de la victoria según su entrenador.
La canaria lo intentó. Apretó, jugó fuerte, largo y por el medio para desestabilizar a la rusa. Pavlyuchenkova jugaba a dos o tres tiros. Arriesgaba.
“Se tiene que sacar con mucho nervio en los primeros saques. Dos primeros tiros muy agresivos y profundos. Carla, tienes que estar todo el rato, así hay premio seguro” alentaba Budó a Suárez.
Xavier le hacía hincapié en la devolución de saque. La canaria había retrocedido unos pasos y lo estaba acusando. “Cuando restas en los momentos importantes estamos perdiendo pista. Nos hemos ido para atrás”.
“Me está mareando con los saques, no leo ninguno” replicaba su pupila. Pavlyuchenkova comenzó a conectar buenos servicios y la canaria estaba desbordada.
Finalmente Carla Suárez cayó por 6-3 en un último set ante una Pavlyuchenkova que enseñó todo su arsenal en pista.
A pesar de la derrota la canaria sale reforzada de París. Mostró una gran actitud a la hora de afrontar cambios en su juego, diferentes tácticas y en la asimilación de conceptos por parte del entrenador. Budó deja claro que es el camino a seguir y que la derrota no hace mal en Carla Suárez.
El próximo objetivo es la Copa Federación y a partir de mañana mismo, ya lo empezarán a trabajar.