El enfado del padre de Wozniacki en Doha

Piotr, entrenador de la danesa, protagoniza un desagradable incidente en el torneo qatarí

Álvaro Rama | 14 Feb 2013 | 20.26
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En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.
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Piotr, dominador padre de la ex número uno del mundo Caroline Wozniacki, protagonizó un desagradable incidente en la pista central de Doha. Durante el partido de tercera ronda que enfrentaba a su hija ante la alemana Mona Barthel sobre el cemento del evento qatarí, se produjo una circunstancia polémica de juego y el progenitor no dudó en intervenir de manera vehemente.

¿Qué sucedió? Un revés cruzado de la tenista germana aterrizó sobre la raya. El juez de línea realizó con las manos el gesto técnico correspondiente para indicar la validez del tiro, indicando que la pelota había caído dentro de los límites. Sin embargo, una voz procedente de las gradas generó cierta confusión en pista, pues se entendió algo similar a un 'out', palabra empleada para designar bolas que caen fuera de los márgenes. La propia Mona se giró hacia la juez de silla, Julie Kjendlie, para comprender el mensaje. Ésta le indició lo sucedido.

Sin embargo Wozniacki se mostró contrariada con la situación, entendiendo que el grito indicaba un error de su rival anulando así sus opciones de continuar el intercambio. A pesar de que no procedía de ningún oficial ni la trayectoria entraba dentro de su alcance. No obstante lo problemático no reside en esta acción. Caroline tenía todo el derecho del mundo a sentirse disgustada y se antoja hasta comprensible que tenga unas palabras con la juez de silla.

El aspecto destacable proviene de la actitud de Piotr Wozniacki, entrando de forma frontal en discusión con la juez árbitro. Encolerizado, a voz en grito, reprendiendo de mala manera a la encargada de dictar sentencia en el encuentro. No quedando ahí el incidente, un encargado del torneo acudió para charlar con el entrenador. No queda claro si indicándole que abandonase las gradas. Fuera lo que fuera, el técnico danés hizo caso omiso a cualquier mensaje manteniendo su posición.

Una actitud poco decorosa, impropia de un torneo profesional y bien merecedora de sanción. El punto finalmente, tras el acalorado incidente, fue repetido a pesar de que Caroline no tenía opción de alcanzar la pelota. Vídeo proporcionado por Amy Fetherolf.