Gulbis deja el tabaco, el alcohol y quiere ser top20

Ernests Gulbis, presente en los octavos de final de Rotterdam, afirma estar dispuesto a hacer propósito de enmienda y considera que durante 2013 está capacitado para volver al top20. Tras batir con firme comodidad al tenista local Robin Haase, al que derrotó en apenas 50 minutos entregando únicamente tres juegos, el letón puso palabras a sus sensaciones, su momento actual y sus objetivos para la temporada.

Procedente de la ronda previa, actualmente ocupa el 132º puesto del escalafón masculino, el controvertido jugador acumula tres victorias consecutivas sin ceder un parcial. Parece empresa leve, pero es una barrera que únicamente ha superado en una ocasión en los últimos 33 meses. El báltico, ex 21 del mundo, que cuenta en su historial con dos títulos ATP, unos cuartos de final de Grand Slam, triunfos sobre Federer y Djokovic al margen de haberle arrebatado sets a Nadal sobre tres superficies diferentes, se muestra confiado en su reinserción competitiva en los próximos meses. "No he jugado Australia este año, he tenido una preparación más larga, he trabajado mejor de lo que lo he hecho nunca. Creo que el resultado es solamente fruto de un proceso natural. Mi objetivo es tener continuidad en la temporada y recuperar mi ranking".

Hundido en la clasificación, se encuentra bregando a través de fases previas y torneos challenger para levantar el vuelo. No obstante, el hecho de renunciar a grandes escenarios y mostrarse dispuesto a hacer el esfuerzo de bajar al barro, parecen un buen síntoma de futuro. "No jugué Australia porque soy el 130 de mundo. El gasto en billetes de avión iba a suponer más dinero que mis ganancias en el torneo. Hubiera sido completamente inútil acudir. Simplemente empleé ese tiempo para entrenarme durante un mes más que otros tipos, y creo que obtuve un beneficio de ello". Quizá no supiera a tiempo que el evento de Melbourne repartía una ayuda excepcional de 1.000$ para sufragar parte del desplazamiento a los tenistas, pero esgrimir ese motivo para un jugador tachado de posición acomodada se antoja esperanzador para el futuro.

Portador de un carácter socarrón, el letón parece no haber perdido un ápice de su sentido del humor a la hora de tratar con los medios. Cuestionado por sus impresiones de la ciudad holandesa que acoge el evento, Ernests respondió con tono jocoso. "De Rotterdam me gusta que la marihuana sea legal aquí, estoy a favor de ello. Desafortunamente los jugadores de tenis no pueden consumir porque son controlados cada semana, pero me gusta la forma de pensar que tiene la ciudad".

Poniendo la mirada en los objetivos de la temporada, muestra plena confianza en sus posibilidades de mejora, con el trabajo como base para alcanzar sus metas. "Si trabajas duro los resultados van a llegar. Si no te empleas a fondo, los frutos no van a estar ahí. Estoy aquí para probarme a mí mismo de lo que soy capaz. Lo que la gente piense sobre mi persona no es importante para mí. Yo creo que voy a ser capaz de volver al top20, eso por supuesto. Todo depende de las circunstancias, así que veremos".

Enumerando las razones por las que cree en su avance, el letón deó una llamativa respuesta. "Me he preparado bien. He dejado atrás muchas cosas en mi vida. Como por ejemplo el tabaco, el alcohol, quedarme levantado hasta tarde, me entreno más,... Por tanto, las piezas van encajando".

Su próximo rival en Rotterdam será Del Potro, finalista en 2012. Un test de altura para el aspirante. No obstante, el último capítulo ante el argentino cayó del lado del letón. Un choque explosivo para no perderse.

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