Paul Henri Mathieu representa algunas de las sombras que se esconden en el circuito ATP, la otra cara del glamour y los súper hombres que dominan hoy en día el mundo del tenis. Mathieu está en ese grupo de tenistas que rompen la teoría de que con trabajo y esfuerzo se puede conseguir cualquier objetivo; el jugador de Estrasburgo está en el grupo de tenistas que personifican el hecho de que con trabajo y esfuerzo se puede conseguir cualquier objetivo, siempre que lo permita la mala suerte.
Desde muy joven Mathieu ha sufrido lesiones bastante graves e inoportunas de las que ha sabido recuperarse de manera excelente. En 1997 y 1998, cuando era un aún un adolescente, fue operado de ambas rodillas pero aún así logró seguir con una estudiada carrera en el mundo del tenis que le llevó a pasar tres años en la academia de Nick Bollettieri en Florida (de 1997 a 2000) y a conseguir el título de Roland Garros Junior en el año 2000. Ahora, a los 29 años, vuelve a enfrentarse a una de sus rodillas: dejó de jugar en noviembre de 2010 y en marzo se sometió a una operación de la rodilla izquierda.
Este domingo, día 25 de septiembre, el diario francés L'Équipe publicaba una entrevista con uno de los jugadores más queridos del país galo debido, seguramente, a sus apariciones en Copa Davis o mejor dicho: gracias a sus derrotas en Copa Davis.
En 2007 ganó a Nikolay Davydenko en los cuartos de final de Copa Davis entre Rusia y Francia. Luego vinieron dos emocionantes encuentros a cinco sets: Richard Gasquet perdió contra Mikhail Youznhy, igual que Sebastien Grosjean y Michael Llodra en dobles ante Igor Andreev y Davydenko. Grosjean consiguió el segundo punto para Francia pero en el desempate Mathieu no pudo con Marat Safin.
Al año siguiente, otra vez en cuartos de final pero contra EE.UU., Mathieu se batió en una dura batalla a cinco sets contra James Blake que perdió y supuso el 2-0 para los americanos. Arnaud Clement y Michael Llodra arrebataron el punto de dobles a los mismísimos hermanos dobles y, de nuevo, la responsabilidad del pase a la siguiente ronda recaía sobre "PHM"... y volvió a perder.
Gracias a su capacidad para reponerse de este tipo de adversidades, lesiones y derrotas importantes, Mathieu ha ganado el crédito suficiente como para poder dar lecciones al respecto. En mayo de este año, aprovechando el tiempo de su convalecencia, el francés publica un libro de consejos de tenis titulado "Tenis: instrucciones de uso".
Mathieu presentaba su libro en el tiempo que le deja su recuperación en el centro de rehabilitación funcional (CERS) de la bonita ciudad de San Rafael (Costa Azul). Allí, junto a su entrenador Thierry Champion, se prepara para su regreso al circuito. El tenista declaraba a L'Équipe que este verano había estado en el CERS en tres ocasiones durante tres semanas: "Ha sido un 'curro', ha sido duro. Desde luego no ha sido un viaje de placer".
Según comenta, el cirujano le ha dicho que todo está en orden pero el jugador prefiere ser cauto y no crearse expectativas muy altas para ahorrarse decepciones. Le gustaría poder jugar algún partido en el TC París de Interclubs (que se celebrará del 5 al 10 de noviembre) pero, por el momento, todavía no puede correr y siempre tiene dolor.
Paul Henri Mathieu espera estar listo para volver a competir para la ATP en 2012. Se prepara con un programa de ejercicios a devolver musculatura a su pierna izquierda y a la parte superior del cuerpo.
Pese a que el francés cumplirá los 30 años en enero y muchos a esa edad ya estarían pensando en retirarse, puede tomar ejemplo de otros "veteranos" que han vuelto al circuito este año 2011, después de superar lesiones que les mantuvieron apartados de las pistas durante meses: David Nalbandian, Tommy Haas, Fernando González o James Blake han demostrado, con más o menos fortuna, que el camino que está siguiendo Paul Henri Mathieu es el acertado.