
El tenis ya tiene a su nueva reina, aunque le costó más de lo que se esperaba serlo. La número uno del mundo, Caroline Wozniacki, ha confirmado su reinado con su triunfo en el BNP Paribas Open 2011 de Indian Wells, donde ha vencido a la francesa Marion Bartoli por 6-1, 2-6 y 6-3.
Lesionada Kim Clijsters y caídas en el camino el resto de las favoritas, la danesa ha hecho valer su buena forma física y su mejor tenis para hacerse con su primer título en Indian Wells. Se afianza en el número uno de la WTA tras su excelente torneo y con una final más dura de lo que parecía a priori y que estuvo a punto de remontar Bartolli. La francesa salió a la pista cansada tras darlo todo en la semifinal contra Wickmayer y no mostró casi nada en el primer set. Sólo consiguió mantener uno de sus servicios y el 6-1 parcial da muestras de las ganas que tenía de que empezara la segunda manga.
Tras los 30 minutos que duró el primer set, empezó el partido de verdad. Wozniacki saltó más confiada que de costumbre y perdió su servicio por primera vez en el partido. Sin a penas darse cuenta, ya iba 0-3 y el set estaba en un punto sin retorno. Bartoli se quitó de encima la etiqueta de convidada de piedra y de sorpresa del torneo y fue a por la victoria, incluso ganado la manga con una rotura de servicio.
En el tercero las cartas estaban sobre la mesa. Wozniacki se llevó no, sin sufrimiento, el primer juego y comenzó a construir sobre esa rotura de servicio su triunfo final. Ganó con su saque y a punto estuvo de romper el saque en el siguiente, pero Bartoli remontó un nada a 40. Hasta el 5-3 los golpes se sucedieron, pero siempre con el control de la danesa que cerró el 6-3 rompiendo el servicio.
Con su victoria, Wozniacki se afianza en la cima de la WTA antes de Miami y antes de comenzar la temporada en tierra batida, su gran reto esto año. La baja momentánea de Clijsters y la lucha a cuartel entre el resto de aspirantes le permite relajarse, pero no dormirse, en intento de ser la nueva reina.