Naomi Osaka volvió a tener presencia pública después de haber desvelado sus problemas anímicos para gestionar la presión. La japonesa tuvo que enfrentarse a lo que más teme en este mundo, un discurso ante una multitud. Lo resolvió con entereza, brevedad y elegancia, mostrándose muy agradecida por haber recibido el Premio ESPY a la mejor deportista femenina del año, algo conseguido por sus méritos dentro de pista y también por su implicación en asuntos sociales.
Naomi Osaka thanks her fans after winning her first ESPY --
(via @SportsCenter) pic.twitter.com/opn0eUVVP3