Ines Ibbou: “Las palabras de Thiem fueron un insulto a mi trayectoria”

Ines Ibbou (Argelia, 1999) pertenece a ese amplio grupo de tenistas que se levantan cada día poniendo en una balanza todo lo bueno y lo malo que conlleva este deporte. La experiencia de competir, de mejorar o de ganar son sensaciones que difícilmente se pueden asumir sin una raqueta en la mano, pero ese camino hay veces que pierde toda su satisfacción y se convierte en una carrera de supervivencia. Pese a ello, cientos de jugadores entregan todo lo que tienen por ese sueño, un sueño del que actualmente solo viven los cien mejores de la clasificación.

Seguramente Dominic Thiem no pensaría en el revuelo que iban a generar sus palabras de rechazo al fondo de ayuda económico que se estaba planteando hacia jugadores de ranking inferior. De hecho, de haberlo sabido, es posible que lo hubiera expresado de otra forma. O que ni siquiera se hubiera mojado. Pero el austriaco fue honesto consigo mismo y afirmó que no había ninguna necesidad de que los mejores del mundo tendiesen sus cheques a sus homólogos del piso de abajo. Claro, era cuestión de tiempo que alguna persona instalada en la base de la pirámide expresara su decepción. Esa persona nació en Argelia hace 21 años y, mediante un vídeo de diez minutos donde relata su situación, se ha convertido en la bandera de todos aquellos tenistas que comparten un mismo pensamiento. Hoy tenemos el gusto de entrevistarla en Punto de Break.

“Cuando escuché las palabras de Dominic me dio mucha pena, especialmente en estos momentos difíciles en los cuales preferimos escuchar cosas positivas y sentir cierta solidaridad”, confiesa la actual 620º del ranking a través de una conversación telefónica. “Era un insulto a mi trayectoria y a mi historia, también a las de muchos más jugadores que viven experiencias muy difíciles y no paran de luchar para que se valore su talento. Fue un golpe duro a lo que hubiera podido ser el primer gesto de solidaridad en el mundo del tenis”, señala con pena. “En ese momento decidí escribir esta carta como una terapia, aprovechando al mismo tiempo para dar luz a nuestra realidad y transformar esta rabia en algo constructivo y positivo. Como un grito al cielo para que toda la gente lo supiera. Cuando le enseñé la carta a mi entorno, estaban tan conmovidos que decidieron ayudarme a transformarla en imágenes y publicarla en redes sociales. Ha sido todo muy rápido”.

En esa carta transformada en vídeo, Ibbou cuenta cómo llegó el tenis a su vida y cuáles son las etapas que ha ido recorriendo junto a él. Incluida esta última, la más dura de todas. “A no ser que seas rico, hay tres formas de ganarte la vida con el tenis: prize money, subvenciones y sponsors. Si el circuito se para, estos tres factores se paran también. Estamos viviendo una especie de muerte del tenis, conozco a un montón de jugadores, algunos de ellos con un gran potencial, que están pensando en parar sus carreras porque no pueden sobrevivir. Supongo que por eso recibí miles de mensajes positivos tras publicar el vídeo. Por ejemplo, yo estaba contenta empezando el año con los 2000€ que gané en mi último torneo, pensaba financiar más torneos con ese dinero, pero ahora me encuentro pagando el alquiler, la comida y otras cosas en Túnez, donde estoy bloqueada, sola y sin jugar. Cuando regrese el circuito no sé si podré jugar, no se si tendré suficiente dinero para costearme los vuelos”, confiesa la de 21 años.

Las palabras de Dominic llegaron en el momento menos oportuno, aunque Ines sabe diferenciar muy bien entre obligación y responsabilidad. “Thiem no es el responsable de esta situación y por supuesto que es libre de hacer con su dinero lo que le da la gana. Pero también los demás eran libres de dar su dinero al fondo de jugadores, tal y como lo hizo Andy Murray, que dio su dinero al NHS. El error que cometió fue alterar una ola de solidaridad con aquellas palabras baratas. Seguramente que en una situación como ésta deban ser las instituciones quienes tengan que salvar al tenis, ya que no se puede hacer un ranking sin nosotros, los jugadores. Ahora muchos tenistas están pasando por una situación terrible. ¿Por qué seguimos viendo las marcas de los patrocinadores pero no su dinero? ¿Por qué hay tanta desigualdad en el mundo del tenis? Sería terrible perder el talento de un nuevo Federer o un nuevo Nadal solo porque no puedan pagarse un billete de avión para ir a jugar el próximo torneo. ITF, ATP y WTA deberían espabilar”, apunta la oriunda de El Biar.

¿Cuáles podrían ser las consecuencias dentro del vestuario tras este parón por coronavirus? Da miedo solo escucharlo. “Si permanecemos en esta situación, sin torneos y sin posibilidades, estoy segura de que habrá una generación sacrificada. Hay jugadores, una pequeña minoría, que ahora están ahorrando dinero porque gastan solo lo necesario, también porque se lo pueden permitir. Sin embargo, la gran mayoría está pensando en abandonar el tenis porque no pueden soportar estos gastos. Si no hay tenis, no hay dinero. Y si no hay dinero, no habrá servido de nada haber sacrificado toda nuestra juventud y los estudios por este deporte. Eso es lo peor, que más allá de los mejores del mundo, el resto no se puede permitir el lujo de esperar a que termine el confinamiento”, asegura la africana.

De momento, el vídeo de Ibbou no solamente ha servido para conocer su historia, también ha servido para concienciar a toda una comunidad gracias al respaldo de varios nombres dentro de la élite. “Ver que grandes jugadores del circuito como Venus Williams, Nick Kyrigos, Bruno Soares y muchas otros personalidades entienden nuestras dificultades significa un apoyo enorme, les agradezco de corazón el gesto que han tenido. Simplemente con sus palabras ya demuestran su solidaridad. Además, muchos de ellos quieren ayudar, lo que me demuestra que no fue un error dar visibilidad a la realidad que vivimos muchos de nosotros. Cientos de jugadores y atletas me han mandado mensajes diciendo que también se veían reflejados en mi historia. ¿No confirma esto que de verdad existe un problema en el mundo del tenis?”.

Ines ha iniciado una revolución que ya no se puede frenar, un llamamiento de ayuda para que los de arriba entiendan que es ahora cuando más los necesitan. Incluido un Dominic Thiem que se ha convertido en el centro de las críticas. “Que haga con su dinero lo que quiera, pero que no impida a los demás organizarse solidariamente y, sobre todo, que no generalice en su discurso con frases que hagan pensar que no merecemos nada, como mínimo merecemos respeto”, subraya Ibbou desde el dolor. “Justo cuando puedes formar parte de la primera ola de solidaridad en la historia del tenis, lo suyo sería intentar que se lleve a cabo aunque sea algo imperfecto, en lugar de complicarlo con ideas que parecen mejores pero que en realidad son falsas. Muchos jugadores están en situación de urgencia, esta es la realidad. Recuerdo que también hay miles de empleos que beben directamente de nuestra actividad como jugadores. En una crisis así, yo intentaría ayudar por todos lados, ya fueran hospitales, al mundo del tenis o a la gente que está pasando hambre. Muchos hablan pero pocos actúan”, sentencia la argelina. “Además, ayudar a la disciplina que te permitió hacerte rico no me parece algo tan ilógico. Espero que Thiem entendiera mi mensaje y que ahora se de cuenta de lo mucho que pueden doler las palabras”.