¿En qué momento un tenista se convierte en profesional?

Más que nunca, este periodo de inactividad ha reactivado como en ningún otro momento el debate que trata la diferencia salarial que existe entre las diferentes capas del tenis. Son muchos los jugadores que han puesto de nuevo sobre la mesa la necesidad de cambiar la forma de repartir el dinero, que no es otra forma que cambiar el tenis. Con todo expuesto, y siendo tiempo de reflexión y acción en varias direcciones, es muy difícil que la ATP pueda escapar de esta necesidad sin haber hecho nada por ello. Pero, ¿en qué momento un tenista comienza a ganar dinero de verdad? Hace una semana, Carlos Gómez Herrera, actual 428 del mundo, nos aportaba información sobre ello en nuestro podcast. Hoy, en las páginas de L'Equipe, Alexis Tetang, antiguo agente de jugadores, vinculado actualmente con torneos menores, da algunos datos más que reflejan como es un mundo que, para él, se desconoce por completo, incluidos los padres de los jugadores, que creen que comenzar una carrera tenística es una panácea.

"Empiezas a vivir "normalmente", correctamente, cuando estás entre los 250 si sabes cómo organizar tu calendario y gestionar bien las ganancias", afirma Tetang sobre el momento en el que un jugador puede comenzar a ganar dinero. "Puedes tener tu capital, gracias a tu familia, o apatrocinadores privados, en países como Rusia, donde sponsors te pueden 40-50,000 euros al año. Ahí juegan un papel importante los partidos por equipos (las interligas de Francia o Alemania), a veces puedes ganar 40,000 € entre junio- y julio en Alemania, y un pequeño cheque de 20.000 en Francia. Puedes ganar entre 700 y 800 € por semana en los circuitos menores de Francia. Hablando en términos generales, con ese calendario puedes ganarte unos 2000 euros al mes".

También interesante e importante es saber reconocer qué se entiende por profesional y quién puede considerarse un tenista profesional, un concepto en el que Tetang se explaya. "La reforma de la ITF (llamada por primera vez en 2019 "Transition Tour" y luego "World Tennis Tour") tenía como objetivo redefinir el circuito profesional, aclarándolo y reduciendo drásticamente su acceso, dejando fuera a los clasificados entre el top-600 al top-800. Se autodenominaban jugadores profesionales, pero no tenían jubilación ni contribución a la seguridad social. Si quieres ser un jugador profesional, pones medios y te poens objetivos, de lo contrario tienes que parar, no hagas cosas para llamarte profesional cuando no lo eres. Al final significa lo que significa: te ganas la vida jugando al tenis. Y no "jugamos al tenis y son los padres los que financian". Es la seriedad del proyecto lo que condiciona todo. Si quieres ayudar a ciertos jugadores, debes ver, por ejemplo, la cantidad de torneos que juegan al año."

-Sobre el término "profesional":

"Estamos en el campo de la competición. Quien dice competición, dice mérito. Si comenzamos a alentar a las personas a ser parte de un sistema cuando no tienen todavía resultados, es complicado. El simple hecho ser profesionales con becas... no va con el espíritu de la competición. Es así. Si rompemos el espíritu competitivo, ya no es el mismo deporte. Dos puntos ATP son un fracaso. Como ser un abogado sin clientes. En mi opinión, lo que se debe hacer es un esfuerzo por explicar los entresijos del entorno profesional desde el principio, especialmente a los padres. ¿Qué hacer para llegar allí? Los jóvenes de un club, con padres, a menudo imaginan que serán jugadores profesionales. Es fácil decir esa palabra, 'profesional'. La gente no sabe en qué se está metiendo. Todos tienen un sueño. Cuando comienzas una carrera, es un poco ingenuo. Probamos nuestra suerte a la aventura. No planeamos mucho. ¿Cuántas personas ves que no saben cómo administrar porque no se ha planeado nada?. Pero una vez que estás dentro, estás encerrado, solo puedes ir hacia adelante, puedes tener un poco de notoriedad en ciertos circuitos y tampoco quieres salir de él".