Leo Mayer: "El ranking es el reflejo del esfuerzo realizado"

El algodón no engaña, y la clasificación mundial del tenis tampoco. Así lo atestigua uno de los grandes clásicos del circuito ATP en el último decenio. Leonardo Mayer es uno de esos tenistas necesarios en la élite, caracterizado por su pundonor y entrega en pista, que tantos éxitos le ha granjeado junto a un potencial nada desdeñable. Con los habituales altibajos que todo jugador puede tener en una dilatada carrera, el nacido en Corrientes se ha legitimado en el top-100, y a sus 31 años se encuentra en un gran momento de forma.

Podría llamársele el "Duque de Hamburgo", siendo característico el sensible incremento de nivel en un torneo que ha ganado en dos ocasiones (2014 y 2017) y en el que esta temporada logró ser finalista, cayendo ante Nikoloz Basilasvhili que impidió el hat-trick del argentino. Ha mantenido un buen tono general todo el año, terminando con un registro de 22 victorias y 25 derrotas, que le permitieron finalizar el año como 56 del mundo. "Lo que uno quiere es disputar torneos importantes, pero para hacerlo hay que entrenar duro estas semanas de pretemporada", asegura un hombre que está trabajando en Buenos Aires, con el fin de llegar en la mejor forma posible al inicio del 2019.

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Su mejor clasificación la obtuvo en 2015, siendo el 21 del mundo, y aspira a volver a firmar una gran actuación en Grand Slam, como ya hiciera en 2014 con unos sorprendentes octavos de final en Wimbledon, cayendo contra Grigor Dimitrov. "La verdad es que 15 son muchos años como profesional. Me motiva seguir, es muy lindo competir al máximo nivel, y a mí me apasiona hacerlo. Es preciso entrenar duro porque cada vez van llegando nuevos chicos con mayor potencial; creo que está cerca un relevo generacional y hay que estar preparado para competir contra ellos", asegura en la web de la ATP un Mayer que en 2016 no finalizó entre los 100 mejores del mundo, pero alcanzó la gloria con su país.

"Esa temporada me centré en la Copa Davis, me costó mucho mantener la concentración todo el año. En todo caso, no me reprocho nada de mi carrera profesional. Tuve algunos partidos que no sé cómo se me pudieron escapar, pero no es nada fácil mantenerse tanto tiempo arriba", afirma Leo, que tiene claras sus metas para 2019. "Quiero poder competir al máximo todo el año, evitar las lesiones y dar lo mejor de mí mismo cada vez que entro en pista. El ranking que uno tiene es la consecuencia del esfuerzo invertido", asevera antes de reflexionar sobre la dureza del calendario.

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Y es que entrenar todos los días durante tanto tiempo y mantener unas pautas concretas no ha de ser sencillo. "Hace tiempo llegó a pasarme por la cabeza la opción de retirarme. Me cuesta mucho entrenar, las rutinas de pretemporada... Cuando empieza la vorágine de viajes todo va más fluido, aunque no es fácil hacer siempre lo mismo. Creo que me he perdido muchas cosas en la vida por el tenis, pero he ganado otras tantas", comenta un hombre que se ha establecido en Estepona (Málaga, España), con el fin de disputar torneos en Europa y poder regresar a casa con prontitud. "Los europeos acaban ganando en descanso a los demás, porque tienen todo a mano, en un par de horas te plantas donde sea". Interesante reflexión de un Leonardo Mayer que quiere seguir dando guerra.