Análisis de la final de Singapur: Caroline Wozniacki vs. Venus Williams

Danesa y estadounidense se disputan el último gran título de la temporada en un año que les debe un premio gordo después de tantas oportunidades fallidas.

Fernando Murciego | 28 Oct 2017 | 19.07
facebook twitter whatsapp Comentarios
En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.
En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.

Hubo algún sabio que al comienzo de torneo predijo que nada de lo que ocurriera en Singapur sería como esperábamos. Halep, Muguruza, Pliskova o Svitolina se han visto obligadas a hacer las maletas antes de tiempo en favor de otras mujeres sin tan buen ranking pero con un fuego mucho más candente en este último tramo del curso. Finalmente, serán Caroline Wozniacki y Venus Williams, dos ex números 1 del mundo nada más y nada menos, las que se disputen la última gran corona individual del 2017. Dos referentes de la época en busca de la recompensa al trabajo bien realizado durante todos estos meses. Solamente una podrá ocupar el trono en Singapur.

Primero, Caroline. Una de las tres Carolinas que llegaron a semifinales y la única con papel asegurado en la función final. El gran (re)descubrimiento de esta temporada después de muchos años en el olvido y con la posibilidad de seguir ascendiendo puestos antes de decir adiós a 2017. Sin duda alguna, la mujer que más finales ha perdido este curso y ahora, por fortuna, la oportunidad de maquillar una poco la estadística. ¡Y de qué manera! Con toda una final maestra, exactamente igual que la cedió en 2010 ante Kim Clijsters en aquella etapa gloriosa de su carrera. Esta vez, con la madurez y la experiencia de haber pasado por varias decepciones, la danesa llega aquí como una de las raquetas más en forma del certamen, habiendo dejado verdaderos recitales desde el primer día del torneo.

Segunda, Venus. La estadounidense hace tiempo que ya no necesita presentaciones, pero es que esta temporada se ha empeñado en ser casi más protagonista que nunca. Final en Australia, perdida ante Serena. Final en Wimbledon, perdida ante Garbiñe. Mañana, final en Singapur, el último premio del año, ante una Wozniacki que viene lanzada y con muy poco que perder. Al igual que la mayor de las Williams, quizá por eso se presente como una final tan abierta como apasionante.

¿Favorita? Aquí llegamos al punto clave para que se decante la final hacia un lado u otro. Una estadística extremadamente cruel con Wozniacki por un 0-7 en su contra que no necesita mayor análisis. De esos siete antecedentes, solamente en una ocasión pudo la danesa arañarle un set a la estadounidense, así que ni siquiera esta mínima alegría puede servir para que el gran público imagine este domingo ese primer triunfo de la europea. Siempre hay una primera vez para todo, nada es para siempre, cada partido es un mundo, etc. Lo que queráis, pero algo muy fuerte tiene el juego de Venus que le hace muchísimo daño a Wozniacki. De hecho, son varios los factores (sistema, experiencia, condiciones…) los que juegan a favor de la afroamericana. Aunque mañana pueda cambiar la película en un segundo.

El final de la temporada ya ha elegido a sus dos últimas protagonistas, dos mujeres que brillaron con luz propia hace algunos años (en el caso de Venus, en el siglo pasado) y que en pleno 2017 se les presenta la oportunidad para reescribir su gran historia. Veremos la enésima victoria de una o la primera alegría de la otra. Radwanska y Cibulkova ya esperan sucesora en una lista de campeonas tan impredecible como especial.