Wawrinka: "Durante un Grand Slam, cada día es muy diferente al anterior"

Dentro de la pobre gira de arcilla de Stan Wawrinka, llegar como tapado de nuevo a Roland Garros, sin entrar en quinielas, podría hacer del de Lausana un rival peligrosísimo. El vigente campeón del major parisino ha concedido una entrevista a Eurosport en la que ha revivido la edición de 2015, venciendo en la final a Djokovic, y lo que espera de esta nueva edición.

Seis victorias y tres derrotas, unos cuartos de final, unos octavos y una priemra rodna es el bagaje del número 4 del mundo en la gira europea previa en Roland Garros. A falta de conocer su rendimiento en Ginebra, Stan llega a París con pocas victorias y un juego muy irregular, un factor, el de la inercia competitiva, que se ha demostrado menos valiosa con Wawrinka dentro de la ecuación. Si Stan cruza a la segunda semana en Roland Garros, será un rival temible.

Stan relata cómo fue pasado ronda a ronda, hasta llegar a una final en la que sorprendió a todo el mundo del tenis. "Estaba bien preparado. Jugando mi mejor tenis, mejorando partido a partido, así que llegué preparado mentalmente para jugar hasta el final. Pude mejorar mi nivel partido tras partido y después de terminar con una increíble final. Para mí, fueron dos semanas increíbles, donde pude jugar cada partido a muy buen nivel y luchando hasta el final".

El suizo deja una interesante reflexión sobre lo que supone competir en un Grand Slam, un torneo de 'muchos partidos diferentes'. "Durante un torneo, cada día es diferente a otro y no debes llevar a cabo el mismo juego del día anterior o de dos días antes, pues las condiciones no son las mismas. Tienes que adaptarse a tu oponente". Es por esa circunstancia por la que el suizo y el resto de jugadores, también todos los aficionados, valoran y han valorado tanto los Grand Slams.