¿Se debería cambiar la sede de la final de Copa Davis entre Bélgica y Reino Unido?

Ayer recuerdo estar viendo la tele y ver la llegada de la selección española de fútbol a Bruselas para disputar un partido amistoso y me decía a mí mismo cómo era posible que a nadie se le haya ocurrido suspender ese encuentro tan insignificante después de que Bruselas estuviera ahora mismo bajo la alerta máxima de un posible atentado. Por suerte, alguien entraría en razón y decidieron suspender el partido y los jugadores pudiera volver a España. Me surgió entonces una pregunta, ¿se debería de cambiar la sede de la final de Copa Davis?

La final entre Bélgica y Reino Unido se jugará la semana que viene en la preciosa ciudad de Gante, a tan sólo 57 kilómetros de Bruselas. Ahora mismo, la capital de Bélgica se encuentra patas arriba, con soldados por las calles durante el día cerca del centro de la ciudad y con la policía haciendo redadas en barrios conocidos por ser frecuentados por yihadistas. Una de las personas que participó en los atentados de París se encuentra actualmente huído y con posibilidad, según la propia policía, de que esté escondido en Bélgica y con el peligro real de que cometa otro acto terrorista.

Estos terroristas aprovechan las aglomeraciones de personas para actuar y provocar más daño. Es por eso que los eventos deportivos, que reúnen a una gran cantidad de gente en un espacio muy reducido, son los que más seguridad deben despertar ya que el daño que se puede producir es inmenso. Ya los propios terroristas intentaron entrar al Stade de France, con entrada en mano, para inmolarse dentro del estadio de fútbol con cinturones de explosivos. La final de la Davis se organizará en el Pabellón Flanders Expo, en Gante, reuniendo a más de 17.000 personas en una ciudad a tan sólo 50 kilómetros del barrio de Molenbeek.

Ya se ha conocido que la seguridad se incrementará para este evento pero absolutamente nadie, por desgracia, puede controlar este tipo de terrorismo ya que puede producirse por una sola persona que vaya andando por las cercanías, bien disparando contra todo el que esté cerca o inmolándose en medio de un grupo de gente. No digo que el terrorista pudiera entrar dentro del recinto, es que algo tan simple como los cacheos y controles antes de entrar al estadio ya producen largas colas de gente y eso, ahora mismo, es un peligro muy grande.

Andy Murray, que vivió de pequeño una situación parecida cuando un hombre entró en su colegio armado hasta los dientes y comenzó a disparar a todo el mundo, ha confesado que no quiere vivir con miedo, que no quiere sentir eso cada vez que salte a una pista pensando que podría volver a ocurrir. El británico quiere hacer vida normal ya que si no, "los terroristas ganarán". Quizá tenga razón, pero también se podría evitar una situación de posible riesgo en un momento como este y no estaría mal cambiar la sede. No hay que olvidar que los británicos son objetivos directos de los terroristas.

Es una situación complicada, ya que cambiar nuestros hábitos sería entrar en el juego de estos terroristas y mostrarles que tenemos miedo, pero por otro lado, todo acto que suponga el peligro para la vida de tan sólo una persona, si puede evitarse, mucho mejor. ¿Qué pensáis vosotros? ¿Sois partidarios de cambiar la sede de la final de la Davis por la situación actual?