Bouchard sonríe 46 días después

La canadiense vuelve a sentir el sabor de la victoria en New Haven                                                     
Pablo Morán Macho | 19 Aug 2014 | 15.11
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En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.
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Eugenie Bouchard volvió a saborear las mieles de la victoria. Un triunfo sin paleativos: doble 6-1 ante la serbia Jovanoski, quien probablemente pagó los platos rotos de casi dos meses sin saber celebrar una victoria por parte de la joven de Montreal. Bouchard gana, y con confianza puede ser una tenista que figure entre las grandes favoritas para Nueva York.

46 días. Con sus mañanas, sus tardes y sus noches. Y sus derrotas, obviamente. Tras derrotar a Simona Halep en semifinales de Wimbledon, el pasillo de la gloria se hizo oscuro. Durante este largo y extenso tiempo para una tenista estuvo Bouchard sin escuchar "game, set and match, Bouchard". Entre medias, tres derrotas durísimas, merecidas, sin capacidad de respuesta.

Porque cuando Genie saltó a la pista anoche en Connecticut en su cabeza rondaba Montreal y Cincinnati. Además de la derrota sin paleativos en la final del All England Club, la primera derrota en Canadá fue la más cruel por lo sentimental. Perder en casa, ante tu público, el año de tu consagración y recibiendo dos roscos. No hay mayor castigo. La canadiense prometió levantarse y mejorar, pero tardaría en cumplirse esa promesa.

Cincinnati no fue mejor. Ante Kutnezsova plantó más resistencia que ante Rogers en Montreal, pero el resultado fue el mismo: derrota, sin encontrar su juego, frágil mentalmente. Pero ayer todo cambió. Ante Jovanoski se vio una Bouchard sólida, moviéndose con gran agilidad por la pista. Segura de sí misma, sin torcer el gesto. En definitiva, la Bouchard que nos tenía acostumbrados hasta el final de Wimbledon.

Mentalmente volvió a ser la roca que ha sido todo el año, impropio para una jugadora de su edad. Bouchard se ha quitado el peso de la victoria de sus hombros. El mundo del tenis espera que sea el paso definitivo para olvidar su paso por el desierto a partir de la final de Wimbledon. Genie coge fuerzas para el US Open y, sobre todo, vuelve a sonreír.