Retos del tenis español en el final de 2013

Los retos del tenis español en el último tramo de la temporada 2013. Después de la recuperación completa de Rafael Nadal tras una experiencia de atadura profesional, pasando de estar en la sombra a prácticamente tocar la luz del número 1, parece complicado encontrar barreras a derribar por La Armada en la presente temporada. No obstante, el tramo final del curso, comenzando por la gira asiática que está a punto de desatarse, ofrece multitud de planos a observar con carácter histórico.

En Punto de Break hacemos un someros repaso de algunas líneas de actividad a observar durante las próximas semanas. Podrían ser hojas de oro en la historia del tenis español. Y podríamos estar próximos a leerlas.

Masters 1000 de Shanghái – La culminación de la gira asiática. El octavo Masters del curso, situado en la ciudad china desde la campaña 2009, representa un terreno inexplorado para La Armada. En su ubicación actual, es el único torneo de la máxima categoría ATP que jamás ha quedado retenido en la bolsa de un competidor español. Indian Wells, Miami, Montecarlo, Madrid, Roma, Canadá, Cincinnati y París-Bercy fueron atrapados en algún momentos por tenistas que defendían la bandera rojigualda. Recientemente se han abordado enclaves de extraña captura. El pasado año, para cerrar el curso, el alicantino David Ferrer se convertía en el primer tenista español capaz de gobernar el título bajo las bóvedas de Bercy en la capital francesa. Hace apenas unas semanas, el mallorquín Rafael Nadal hacía suyo uno de los torneos más esquivos para el tenis nacional: el Masters 1000 de Cincinnati, apenas una vez atrapado por un compatriota en tiempos pretéritos (Carlos Moyà en 2002). Y el balear, invicto sobre cemento en 2013, tendría el aliado de la superficie. Siendo el Masters que lleva menos tiempo en el calendario, ésta será su quinta edición, no ha lugar a hablar de maldición en la ciudad china. Más aún teniendo en cuenta que en esas cuatro temporadas de competición, tanto Rafael Nadal (2009) como David Ferrer (2011) han logrado pisar el último partido. Sin embargo, nunca dieron el paso decisivo. Habiendo roto barreras recientemente en eventos de Masters 1000, ¿logrará alguno completar la colección y traer para España el trofeo chino?

Dos tenistas en top3 – A principio de temporada, pensar en algo de esta magnitud podía quedar fuera del pronóstico del más optimista. Rafael Nadal estaba inmerso en la baja deportiva más larga de su carrera y la fecha de su regreso a pistas era incierto. Más de seis meses retirado de la competición y habiendo renunciado al Abierto de Australia, su reinserción deportiva parecía encarar un proceso gradual. Sin embargo, el mallorquín ha protagonizado uno de los retornos tenísticos más potentes que se recuerdan. En trece torneos, doce finales y diez títulos. Una resurrección profesional forjada en pista desde febrero que, a días de entrar en octubre, está a punto de devolverle al primer peldaño del escalafón. Por otra parte, David Ferrer. El de Jávea terminó 2012 siendo el hombre con más partidos disputados, más victorias selladas y más títulos levantados. Caminando por encima de la treintena, es un ritmo difícilmente aguantable. Más aún teniendo en cuenta la madurez alcanzada por tipos más jóvenes como Novak Djokovic o Andy Murray, auténticos devoradores en cemento, la superficie preferente del circuito. Sin embargo, el levantino aprovechó el momento frágil de Nadal para romper la barrera del top3 por primera vez en su vida. Ahora, a final de temporada, tiene una nueva opción. Cuarto en la lista oficial, apenas 300 unidades le separan de Andy Murray, tercero en discordia. No obstante, el escocés renunció a la gira asiática (donde defiende más de un millar de puntos) para tratar su espalda. David necesitaría grandes resultados en gira asiática para sumar lo suficiente, pero tiene en su mano ascender al tercer peldaño. Puede ser cuestión de tiempo que el tenis español tenga dos hombres entre las tres primeras posiciones del ranking masculino. Inédito en la historia del deporte.

Dos parejas de dobles maestras – La posibilidad de romper barreras no queda constreñida al individual. En 2012 ya se rompieron marcas de calado histórico. Marc López y Marcel Granollers se convirtieron en la primera pareja española capaz de alcanzar la Copa de Maestros en modalidad de dobles desde 1994. Y los primeros en alzar el trofeo desde que Juan Gisbert y Manuel Orantes lo consiguieran en 1975. Por tanto, hacer historia en 2013 resultaba bastante complicado. Pero esa vuelta de tuerca puede darse en las próximas semanas en forma de un hito inédito en la historia del deporte. España puede clasificar dos parejas al torneo final de temporada. La pareja catalana, vigente campeona, marcha tercera en la lista del año. Por otra parte, el dúo formado por Fernando Verdasco y David Marrero van afianzando el octavo peldaño de la temporada, el último que da acceso a las Finales ATP de Londres. Madrileño y canario, campeones esta pasada semana en San Petersburgo, han abierto una pequeña brecha de puntos en ese puesto que marca el corte. Ahora mismo, dos parejas españolas estarían clasificadas para el torneo broche del curso. Quedan dos meses de competición para sellar una hazaña nunca contemplada.

Copa de Maestros – En la época dorada del tenis español, es uno de los pocos cetros individuales que no ha sido conquistado en este siglo. El torneo broche de temporada únicamente cayó dos veces en manos de un tenista de La Armada (Manuel Orantes, 1976; Àlex Corretja, 1998). Nuevamente será el O2 Arena de Londres el escenario para decidir al último campeón del curso, y el tenis español volverá a tener representación múltiple con toda probabilidad. Rafael Nadal, destacado líder del curso, selló semanas atrás su pase. El alicantino David Ferrer, cuarto hombre del año, deberá certificar su pase en los próximos días. Ambos saben lo que es abordar una final en la Copa de Maestros, pero ambos (Ferrer en 2007; Nadal en 2010) cedieron el pulso decisivo ante el suizo Federer. El torneo, celebrado en el mes de noviembre, viene levantando algunas quejas por parte de la cúpula mayor del tenis español. Sobre todo de boca del tenista de Manacor. La circunstancia indoor sobre pista dura representa el entorno más esquivo para los representantes de La Armada. No obstante, es una variante a asumir por el momento y los esfuerzos deben ir centrados en tratar su gobierno a corto palzo. La corona más brillante del expediente individual de Ferrer tuvo lugar bajo bóveda, precisamente a final de temporada, y reciente en el tiempo (en 2012). Nadal, que llega invicto sobre cemento al otoño, debe manejar un escenario aséptico, yermo de agentes naturales, donde los efectos no son tan primados. Se premia el tenis directo, y eso es lo que el mallorquín viene trabajando. Un patrón de finalización, no tan orientado a la construcción como antaño. ¿Tendrá un buen acomodo en el O2? ¿Será la temporada para que el tenis español rompe esa barrera intacta en este siglo?

Top15 WTA - Inédito en el siglo XXI para el tenis español al cierre de una temporada. La canaria Carla Suárez tiene en su mano bañar con otra capa la madurez deportiva alcanzada en 2013. Un curso en el que rompió los límites del top20 por primera vez en su vida, erigiéndose como. Una cosa es brillar durante el curso: con su incursión en la segunda semana de Wimbledon, Suárez cruzó el ecuador en todos los Grand Slam, algo solamente logrado por Conchita y Arantxa anteriormente. Poniendo las zapatillas en la antepenúltima ronda de Nueva York, la grancanaria volvió a convertirse en cuartofinalista de un major cuatro años después. Pero otra cosa completamente distinta es cerrar una temporada en un puesto de privilegio. Eso denota no solamente capacidad para rendir a gran nivel, sino para hacerlo de manera sostenida durante un amplio período de tiempo. Eso es crecimiento. Ahora mismo Carla es la decimocuarta tenista del mundo. Decimosexta carrera del año. Lo más alto que había cerrado Carla una temporada era posición 34 (en las campañas 2009 y 2012). Es decir, de quedar fuera del top30 a optar a formar parte del top15 al cierre del año. Si tomamos esta referencia como valor absoluto, habría duplicado su peso en el circuito. Desde que Conchita Martínez cerrara la campaña 2000 en la quinta posición, ninguna española ha sellado una temporada entre las 15 primeras del circuito. Eso es lo que tiene ante sus manos Carla Suárez.